Está ubicada en el corazón del Valle de Colchagua entre el río Tinguiririca y el estero Chimbarongo. En 1916 Viña Maquis fue adquirida por la familia Hurtado que en 1927 construye la primera bodega de vinificación y guarda. La bodega, vigente hasta la actualidad, dio el inicio a la elaboración y comercialización de vinos de alta gama. Las características propias de su terroir distinguen a Maquis del resto de las viñas del Valle de Colchagua y, en general, explican por qué este viñedo es un lugar tan especial y único para el cultivo de cepas tintas.